martes, 30 de junio de 2015

ya no florecen para mí las rosas blancas.

Estoy pensando que puedo escribir
Y una voz en mi interior hablo por ti
Llenando de oscuridad mi corazón
Yo que siempre escribo sobre el amor
Dulce y blanco como la rosa de mi jardín.

Hoy arrastrare las cadenas de mi soledad 
A las puertas oscuras de lo gótico
Donde las frases se derraman con amor
Sobre la sangre de un pasado que existió
Como las lágrimas negra que absorben 
Los recuerdos donde todo humano 
Deja escrito su epitafio.

Me declaro antes los ojos rojos de la luna
Autor de poseer su cuerpo bajos las estrellas 
Dejando sobre su piel los besos ardientes del amor
Donde la noche  se vistió de fantasma 
Cayendo sobres mis hombros sus oscuras miradas 
Acusadora de todos mis pecados sobre una rosa blanca
Que por años se fue  marchitando entre mis manos 
Dejando que hoy sea yo solamente la sombra de su amor
Tratando de devolverle su color cada noche cada hora
Y segundos en que se me va la vida teniéndola viva
En cada letra que aunque sea oscura siempre será amor.

A veces le pregunto al cielo atando todos los demonios a mi alma 
¿Porque dejarme en esta tierra si ya no florecen para mí las rosas blancas.?
 Espero mi muerte para que su tumba seas mi refugio.